El 24 de agosto de 1837 se libró una de las batallas más importantes del primer conflicto carlista: la batalla del villar de los Navarros. Esta batalla fue decisiva para que el pretendiente al trono, Don Carlos María Isidro de Borbón, finalmente se convirtiera en rey de España. Durante el desarrollo de la contienda, el ejército carlista consiguió dar un vuelco a la situación, pasando de estar en riesgo de derrota absoluta a conseguir imponerse a las fuerzas isabelinas.
Esta batalla es de gran relevancia, no solo por su importancia histórica, si no también porque fue la primera batalla narrada por Charles Lewis Gruneisen, un reportero del periódico londinense The Morning Post considerado el primer corresponsal de guerra de la historia. Gruneisen acompañó al ejercito carlista durante la contienda e incluso fue condecorado por Don Carlos tras su intercesión para salvar la vida de varios soldados carlistas que iban a ser ejecutados.